Edwin Madrid
SERÁ QUE UNO PUEDE SER TAN TORPE
Cuenta la encantadora y bellísima Carmen Del Pilar que hace tiempo tenía ganas desbordadas del poeta Antonio. Que cuando le escuchaba leer se humedecía y era capaz de correr a encerrarse en el baño sólo con el recuerdo del espigado poeta. Mientras dice esto ni siquiera una línea de rubor cruza su rostro.
Imbécil ¡Triple imbécil! En ese tiempo, por ella golpeaba mi cabeza en las mesas de las cantinas.
Edwin Madrid
Mordiendo el frío
Madrid, Visor Libros, 2004
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